jueves, 1 de septiembre de 2011

Perdon!

Hola gente!! bueno las vacaciones y MUCHOS BACHES nos llevaron a Sara y a mi a no poder escribir nada, pero PROMETO y doy mi palabra de que antes del domingo, el 4 capítulo estará aquí posteado, y promete bastante eh! no os lo perdaaais :)
miles y miles de besos internacionales, Paola :)

lunes, 20 de junio de 2011

Capítulo 3.

-¿Estás lista?-pregunta Elena
-Te odio.
Sara y Elena atraviesan la puerta de entrada, mientras porteros a ambos lados de esta, las miran de arriba a abajo. Todo está muy oscuro. La sala solo se ve iluminada cuando miles de luces multicolor alumbran a la gente. Lo único visible es el DJ, alumbrado por un gran foco. Miles de bafles. Olores desconocidos para Sara, demasiado ruido. La música junto con la gente, hacen temblar el suelo. Todos parecen estar metidos en la canción, saltando y gritando como locos. Algunos tíos intentando meter mano a algunas tías. Otros lo consiguen. Nadie piensa en nada al parecer. Sin remordimientos, el momento. Sara agarra fuertemente a Elena. Se encuentra perdida.
-Sara, necesito que esperes aquí. Si hay algún problema, podrían echarte a ti las culpas, y no creo que te guste, viniendo de donde vienes.
-¿ME VAS A DEJAR AQUÍ SOLA?
-Vamos Sara, diviértete. Búscate un buen tío y déjate llevar, no seas plasta.
-De acuerdo... Estaré en la barra. NO TARDES- exigió Sara.


"La misma puta gente que hace un año y medio"-piensa Paola-"Los vicios de mierda... ¿Quién es esa?" Paola está sentada en un sofá, junto a un par de amigos. De pronto ve llegar a una chica que no había visto nunca. La extraña se planta delante de ella, y la mira fijamente.
-¿Y tú quién coño eres?
-Elena. Tu hermano me mandó aquí...
-Ah, de acuerdo. ¿Tienes la pasta?
-Aquí tienes.-Elena le pone el dinero en la mano a Paola.
-Bien- Paola saca una bolsita negra de su bolsillo.- Encantada de hacer negocios contigo.
-Gracias. Tu hermano Álvaro nos ha hablado mucho de ti, pero nunca te había visto...
-Bueno, la verdad es que tuve unos proble...-Alguien se choca con Paola por detrás. Se da la vuelta al instante- Mira por dónde vas, gilipollas.
En ese momento, Paola se queda seca. No cree a quien tiene ante ella. ¿Por qué? ¿Por qué así?
-¿Qué haces tú... aquí?- dice Paola.
-Cómo has cambiado...


Sara camina, esquivando a la gente. Consigue llegar a la barra. Mientras espera al camarero, Sara analiza su situación. "¿Cómo estará Pablo? Seguramente después de haber pasado así de él, no quiera saber nada de mí. O tal vez no se haya olvidado de mí, con lo pesado que era. Ahora mismo no tengo ni idea de dónde puedo encontrarle. Si hubiera escuchado todo lo que él me decía ahora mismo no estaría rayándome así... Tampoco hubiera ido..."
-¿Qué te pongo?- Un chico multitatuado le pregunta.
-Ponme un vodka limón.
Alguien a su lado se percata de su presencia.
-¿Sara?-Sara no logra diferenciar al chico entre la oscuridad.
-¿Quién eres?- Por más que se esfuerza, no consigue verle bien.
-Soy yo -Se acerca un poco más- ¿Me ves ahora?
Claro que le ve. Le está viendo perfectamente.


-¿No piensas decir nada, Paola?
¿Cómo va a decir algo? Año y medio después, aún no ha pensado qué decirle exactamente. Tanto tiempo, esperando a este segundo. Una vez que le tiene delante, todo vuelve a su mente. Le abraza, sin contestar. Siente como sus brazos la sostienen fuerte. Otra vez esa sensación...
-Te he echado de menos.
-Siempre dices lo mismo, Iván.
-Ha pasado un año y medio, sin saber de ti. ¿En serio crees que no he pensado en ti? 
Vuelve a abrazarle. Su olor. Su mágico olor. Simplemente desea que todo se pare ahora. Deja de escuchar la música para centrarse en el momento.
-¿Me has echado tu también de menos?-susurra Iván en su oido.
Los ojos de Paola brillan, pero sin derramar una lágrima. Tampoco contesta.
-Mírate, estás preciosa.
- ¿Desde cuando un chico pijo viene por estos antros?
-Me enteré de que habías vuelto, y por eso estoy aquí.
El corazón le da un vuelco. "¿Por mí? Es el mismo. Es Iván."


-¿Pablo?
-Si haha.-Pablo abraza a Sara. Esta no puede creerlo.
-¿Qué haces tu aquí?
-Olvidas que este es mi ambiente.- Sara nunca le escuchaba. Eso, explicaba mucho.
-Ahh es cierto.-sonríe.
-No te he visto desde hace mucho. Me enteré de lo de Carlos y Pilar... Lo siento.
-No hay nada que sentir. La puta con el putón.
-Vaya, se ve que los quieres mucho.
-No hablemos de eso. ¿Cómo estás?
-Pues genial... Bueno, ya te habrá contado Elena...
"¿Elena? ¿Cómo? Pero si no me ha dicho nada..." Piensa Sara. Mira hacia la derecha y ve a Elena acercándose. Se apoya en el hombro de Pablo.
-Ya lo tengo, cariño.- En ese momento Elena besa a Pablo. Y Sara se da cuenta de que tal vez era eso lo que Elena tenía que contarle, y a lo que Pablo se refería. Siente dolor en su alma. Y ya sabe con certeza lo que siente por Pablo.
-Bueno gordo, ¿nos vamos a probar esto?-dice Elena enseñándole la bolsita.
Ambos se levantan y se van cogidos de la mano, mientras Pablo le susurra a Elena al oído. Ella ríe. Sara sin embargo, se queda mirando cómo se alejan.


-Quiero presentarte a alguien.-dice Iván.
Paola no puede creer lo que está viendo. Más bien, no lo quiere creer. Iván está llamando a una chica. No es sólo otra chica. Es la misma por la cual pasó todo ese tiempo encerrada. Iván se da la vuelta para recibirla, y al darle un beso y darse de nuevo la vuelta, queda impresionado al ver a Paola alejándose, rápidamente. Paola llega rápidamente a la barra, y toma asiento.
-Fran, ponme un puto chupito.
-Marchando Paola. Estás guapísima.-Pero Paola no le escucha.
-JOOOODER- Grita Paola.
Inmediatamente, la persona sentada a su lado se exalta, pegando un bote. Se queda mirando a Paola, asombrada.
-¿PAOLA?
-¿SARA?